Una de las alternativas más usadas a la hora de cambiar el tejado en casas antiguas son las tejas árabes, pero muchas personas no saben exactamente qué tipo de tejas son y cuáles son sus características.
Lo que conocemos como teja árabe, también denominada lomuda, es la clase de teja que se suele utilizar en los tejados de las casas que tienen una pendiente considerada. Por tanto, las tejas árabes no son otra cosa que tejas curvas.
Como ya hemos mencionado este tipo de tejas se utilizan en tejados con cierta pendiente, de ahí su nombre de lomuda y se fijan en los tejados con la parte cóncava mirando al cielo, y la convexa en dirección contraria con el objetivo de una mayor seguridad, y que no penetre el agua en ella. Aunque otra de las características de la teja árabe consiste en su impermeabilidad, hay que tener en cuenta que una rotura en la teja puede hacer que penetre el agua en ella, causando las famosas goteras en tu tejado.
Este tipo de tejas se suele utilizar en diferentes construcciones, pero es habitual en pueblos con una tradición antigua, que tienen una arquitectura vernácula.
Para el metro cuadrado suelen necesitarse de 25 a 30 tejas árabes dependiendo de la longitud de las mismas. Aunque lo habitual es encontrarnos con una anchura de 21 centímetros, y una longitud de 45 centímetros. Es un tipo de teja pesada puesto que puede llegar a los 2 kilogramos.
Debido a las similitudes que tienen estos dos tipos de tejas para averiguar de qué teja estamos hablando lo más sencillo es fijarnos en su forma. Si vemos que tiene una forma más cilíndrica estamos ante tejas de cañón, si no es así estaremos ante las tradicionales tejas árabes.